Recamara de la Diosa.

por Sasha Vie Feb 04, 2011 2:28 am

Manteniéndose ahora en el único lugar en el que podía encontrarse a salvo, la mujer de cabellos violáceos siempre se encontraba en una modesta habitación para pensar ahora en los nuevos acontecimientos que no solo ocurrían en el santuario si no fuera de este, el mundo ya empezaba a dar rastros donde el mal ya quería acechar al mundo que trataba de proteger pero esto aún no era muy consciente sobre la responsabilidad que debía ejercer, solo sabía que ella era la nueva reencarnación de Athena.

Apenas y estaba sentada al borde para mirar fijamente su sombra, las antorchas parpadeaban constantemente, abrazaba aquella única posesión de lo que me recordaba quién era en verdad, ese brazalete hecho con pequeñas guirnaldas de flores.

por richad Vie Feb 04, 2011 11:00 pm

Un rincón se encontraba sumido en oscuridad, aquel sitio sagrado, lugar de descanso de Athena, la gran diosa de la guerra inteligente, la sabiduría, mi hermana menor, mi despertar había llegado, en una época donde parecía avecinarse una etapa oscura para los humanos mi cosmos estaba dispuesto a iluminar la tierra, de pronto aquella oscuridad fue desvaneciéndose y un cosmos dorado con tintes rojizos como las llamas del sol apareció y de él una túnica blanca con adornos en oro en un joven cuerpo, era yo, de allí emergí, con mi mirada fría y roja, mis cabellos también de tonalidad carmesí se movían a mi cosmos y un viento cálido envolvió aquel lugar, mire a una joven que estaba en dicho sitio, no cabia duda era ella, Athena, camine hacia ella suavemente y mis pisadas hacían eco en la habitación.

Querida Athena, hermana, que bueno que te he encontrado, ¿me recuerdas?, me desvanecí a unos metros de ella y aparecí a su lado y pase mi mano derecha por su angelical rostro, que hermosa eres, se nota que cada reencarnación iguala casi a la imponencia y belleza de tu original ser, luego de aquellas palabras solo calle, a la espera de la reacción de mi hermana.

por Shion. Vie Feb 04, 2011 11:16 pm

Al salir de mi Camara comence a caminar en direccion al templo mi Amada Diosa... o mas bien nuestra amada Athena... Podia percibir el cosmos de la joven mei moverse paso a paso detras de mi. La gentileza del viento refresacaba la tarde mientras los rayos del sol comenzaban a desaparecer en el horizonte de las motañas dandole paso a la noche y a sus estrellas sagradas que conformaban las constelaciones que los santos de athena resguardaban.

Habia llegado a la Casa de Athena apoyando mis manos sobre sus puertas para abrir estas entrando al majestuoso Templo de la diosa. prosegui a dar unos pasos haceindo una señal con mis manos para que Andromeda se detuviera y me esperara en la sala principal del lugar. me adentre en el templo hasta llegar a la habitacion de Athena Sasha quedandome al otro lado de su puerta abriendo mi boca para dejar salir unas palabras en un tono de voz frio y calmado.

-Athena-Sama, Tiene visitas... Un Santo de Bronce desea hablar con usted.

Al finalizar mis palabras me di media vuelta y comence a caminar lentamente hasta la sala principal donde habia dejado a andromeda, pero algo inesperado sucedio, un fuerte cosmos se hacia presente en la habitacion de la diosa... se podia deducir que por su fuerza se trataba de un dios, lo cual me dio razones para preocuparme asi que rapidamente me teletransporte dentro de la habitacion de Athena observando a aquel hombre quien se hubicaba a una distancia no muy prudente de Athena.

-Le pido y porfavor retroceda a una distancia mas aceptable de nuestra diosa... Solo dire esto una vez...Asi que no perdamos el tiempo alargando una conversacion que no nos llevaria a ningun lado..

Dije friamente sin apartar la mirada de aquel hombre que parecia ser algun tipo de dios... y por lo visto ya este conocia a las vidas pasadas de nuestra diosa por lo que debia estar atento a cualquier movimiento que este hiciera.

por Sasha Sáb Feb 05, 2011 12:13 am

La joven permaneció sentada cuando alertándose escucho el abrir de las puertas, recluida a veces en una soledad para mantenerse fuerte pocos iban a visitarla a menos que fuera demasiado necesario. Sasha podía ver entre ese pabellón de madera la silueta del patriarca que inclinándose anunciaba la llegada de alguien en particular, una frágil sonrisa se plasmó en sus labios pues el disfrutar aunque sea la compañía de una persona no sería tan malo.

Está bien.

Su voz sonaba tan amable como siempre, sentándose ahora justo al borde de la cama esperaba la llegada de esa misteriosa persona que deseaba verme. Solo transcurrió un instante cuando el fuego de las antorchas se apagaron tornando ese cuarto en una completa oscuridad, parpadeante un cosmos envolvía una figura ya bastante conocida para la diosa, aún no despertaba su completa consciencia de la divinidad que poseía, entendía de quién se trataba pero todo parecía ser levemente confuso.

Decidida voltearía hacia la dirección en la que esa voz provenía cuando sin esperarlo, Apolo ya había recorrido ese trayecto posando su mano delicadamente sobre su mejilla, su mano delineaba tersamente la piel de Sasha, al no estar acostumbrada se limitó a bajar levemente la cabeza esperando que se terminará aquella acción.

Tan solo con sentir tu energía puedo saber de quién se trata… Apolo.

Era demasiado evidente sobre que ocurría en la habitación, la reunión de dos dioses, cosa que alertó severamente al patriarca que sin dudarlo se teletransportó para ser testigo de cómo ese hombre mantenía una distancia no prudente de ella, su rostro buscaba a Shion brindándole una sonrisa al agradecer ese gesto de protección haciéndola sentir más segura de sí misma, por lo que tomaba el mismo gesto al tratar de protegerle tal vez de la insurrección hacia Apolo.

Gran Patriarca… es mi hermano. Apolo no esperaba tu visita, ¿qué puedo hacer por ti?

Retiraba la mano del pelirrojo una forma respetuosa, era momento de que empezará la joven a actuar como la diosa que era.

por richad Sáb Feb 05, 2011 1:17 am

La presencia ante Athena era algo ya conosido por miser, una gran paz y tranquilidad se podia respirar en aquel lugar, sin embargo, alguien interumpio en aquellso momentos, un santo dorado, solo habia una persona que se atreviece a entrar de esa manera, no em cabia duda que era el patriarca, gire mi rostro y lo observe seriamente y baje mi mano del rostro de mi hermana solo cuando ella delicadaemnte la apareto, no dije palabra alguna, solo me limite a escuchar, aquel joven era muy insolente y Athena paresia mas seria que en ocasiones anteriores.

Santo de Athena, patriarca de este santuario, solo te pido que dejes tu insolencia, estas ante un dios y el hermano mayor de Athena, soy Apolo, tal como ella te lo ha dicho, si quisiera hacerle algo ya no estaria ella aqui o mas bien tu ya no estuvieses en este mundo, hasi que porfavor dejanos a solas, gire mi rostro hacia athena, por favor hermana, disculpa mi actitud, pero espero que tus demas santos sepan referirse a un dios, porfavor dime Richad que es el nombre de este cuerpo, ya que me llames Apolo es una formalidad que no es necesaria en este momento, he venido hasta aca solo a ver como ha sido hasta ahora tu despertar y ofreserte mi poder, porcierto ya se que uno de tus santos tiene los frutos del gran arbol del inframundo, ¿te puedo ayudar a forgar el rosario?, dichas mis palabras solo calle, a la espera de la reaccion de mi hermana y aquel santo dorado.

por Shion. Sáb Feb 05, 2011 2:57 am

Poco después de haber hecho mi aparición dentro de la recamara de Athena y haber dictado mis palabras recibo una respuesta por ambas partes... La primera persona en responder fue nuestra amada y hermosa diosa Athena dictándome unas palabras que calmaron mi ser ante la presencia de un completo extraño para mi, lamentablemente mi calma no duraría mucho puesto que aquel hombre de cabellos rojizos respondió ante mi llamado de una manera muy pesada he irrespetuosa.

-Me temo que eso no podrá ser... Usted lo ha dicho, yo soy un santo de athena así que por ende yo solo sirvo a mi amada y cautivante diosa... No gastes tu saliva tratando de explicarme si eres o no un dios ya que si eh de servirle a un dios hasta la muerte esa es Athena Sama. Tampoco te atrevas a repetir una orden como esa hacia mi en frente de la señorita diosa, ¿Acaso no sabes que es una falta de respeto dar ordenes en un templo ajeno? este es el ejercito Ateniense... Si debo retirarme pues que Athena me lo ordene y solo así obedeceré sin replicar.

Al decir estas palabras dirigí mis ojos hacia el rostro de la señorita Athena esperando una orden que viniera de la misma para aceptarla sin replica alguna tal y como lo había dicho, confiaba mucho en mi diosa así que no dudaría en atender sus ordenes.

por Sasha Sáb Feb 05, 2011 4:33 am

El ambiente empezaba a sentirse ya bastante tenso pero la expresión en el rostro de la nueva Athena se mantenía serena, no permitiría exaltarse sobre ese tipo de cosas, tenía que controlar parte de sus emociones para mostrar que su carácter siempre se mantenía firme. El joven dios supo cuál era su postura del tema cuando apartaba su mano del rostro de la chica pero este no tardó en reaccionar a las palabras dichas por el patriarca, comprendía Sasha sus puntos pero ambos tenían parte de razón y a la vez no.

Hermano te pido por favor que no amenaces a la persona que durante todo este tiempo ha velado por mi seguridad. Antes de saber de tu despertar estos hombres como dices son los que se han sacrificado más de lo que un dios ha hecho por mí, no espero ofenderte pero si hay alguien con el que debes de dar la cara seré yo.

El iris esmeralda de sus ojos se limitaron a dar un leve brillo, poniéndose de pie ya que todo sucedía en la alcoba. Ahora seguía Shion, entendía sus sentimientos pero no podía darse el lujo de crear enemistades de tal magnitud, más cuando el mismo Hades ya empezaba a mover sus tropas.

Patriarca, sé su preocupación con respecto a esta situación pero ahora el dios Apolo no muestra que esté en peligro, si su llegada fue inesperada no es razón para crear enemistades innecesarias, caballeros les suplico de la manera más atenta que en mi presencia eviten este tipo de comportamiento.

Aunque se lo pidiera ella no podía llamarlo refiriéndose a su nombre mortal, daba un suspiro pues no deseaba alargar todo eso y cometer un error.

Agradeceré infinitamente tu ayuda ya que Hades ha despertado pero fue mi padre el que me ha encomendado la tarea de proteger a esta Tierra a la cual me he sacrificado entregándome por amor a los humanos.

Las palabras de la joven dejaban entrever que ambos la habían ofendido dejándose arrebatar por su orgullo, levantándose de su cama se apartó para tomar a Niké y posicionarse a un lado donde se encontraba el patriarca.

No me parece que sea el lugar indicado para tratar este tipo de asuntos, podemos ir a la sala del patriarca si les parece a ambos. Patriarca… podemos partir.. es necesario su opinión con respecto a las noticias sobre los frutos del Paraíso al parecer aún no se me ha informado de eso.

por richad Sáb Feb 05, 2011 9:12 pm

El ambiente estaba tenso, aquel santosolo por ser el patriarca y haber protegido a mi hermana y continuar haciendolo paresia creerse con la suficiente autoridad para ser irreberente delante de un dios, delante de uno de los olimpicos. Las palabras de Shion no me gustaban para nada, tenia infinitas ganas de hacer desapareser a aquel mortal por su insolencia, ademas de todo me tuteva como si fuese otro sucio mortal, sin embargo, yo era un dios, una divinidad en todo su esplendor y debia comportarme como tal, luego de escuchar atentamente las palabras de mi hermana solo asenti con la cabeza y luego respondi.

Athena, disculpa mis palabras, sabes bien que no me gustan allgunas cosas.. pero bueno, solo por ti are una escepcion, por mi no hay ningun inconvenienete en dirigirme a la camara del patriarca, luego de mis palabras solo di unos pasos para buscar la salida y esperar una respuesta de aquel inpertinente hombre, un viento calido volvio a soplar, mi cosmos estaba completamente apagado, mi presencia era casi nula, como si fuese un humano nrmal, no queria que cualquier otro santo aparesiese en el lugar con las mismas palabras insensatas, arrogantes a mi pareser.

por Shion. Dom Feb 06, 2011 3:59 am

Las palabras de mi Diosa daban clama a la tensa situacion. Dicto palabras sensatas que me hiceron sentir mas seguro de su bienestar pero aun asi mis poderes mentales me seguian alertando de Apolo, por lo tanto bajar mi guardia no era una opcion. Se habia planteado la idea de ir a mi camara, La camara del patriarca para poder resolver el asunto con mayor comodidad. accedi a su peticion asiento con la cabeza y sin decir palabra alguna puesto que seria una falta me di media vuelta y nos teletransporte al lugar.

OFF: Disculpen post corto, falta de inspiracion-

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