Ficha Sune de Behemoth

• Nombre: Sune

• Edad: 19 años.

• Armadura: Sappuri de Behemoth, Estrella Celestial de la Soledad

• Descripción de personalidad:
Sune es una joven tosca y testaruda, no piensa las cosas demasiado prefiere dejarse llevar por el impulso de lo que su corazón le indica. Más allá de su rudeza es una chica callada y bastante desconfiada, que por dentro esconde una forma de ser mucho mas sentimentalista, con anhelos, sueños y hasta amor. Palabras raras para describir el interior de un espectro, pero una parte de su humanidad quedo latente a pesar de encontrar su paz y su lealtad a la muerte y su señor. Esa pizca de la triste chica que comenzó a vivir el día que el juez de Griffon le dio muerte para así llevarla ante las huestes infernales, su admiración. A pesar de todo, sabe cuando debe ser seria, y conoce su lugar, es una muy leal servidora.

• Imagen:


• Historia:
Poco sabe ella de su historia, desconoce la fecha de su nacimiento, la identidad de sus padres o de su nacionalidad. Su memoria comienza un poco más adentrada su infancia, desde que podía recordar vivió en una familia amorosa que albergaba algunos huérfanos. La habían encontrado en una de las grandes plazas de Grecia, allí en el suelo tirada con 4 años, una niña inconciente que al despertar no sabía ni su propio nombre. Un hogar vivaz y calido era todo lo que se podría decir, personas que la amaran y la cuidaran. Pero ella por algún motivo no sentía que perteneciese en ese lugar, en todo aquel esplendor ella se mantenía alejada, siempre en silencio observando, desconfiando no de aquellas honestas personas, sino de si misma. Pero poco duró la alegría, en la gloriosa Grecia también había miseria. Primero llegó la pobreza, un accidente les arrebato a las jóvenes “hijas” la presencia de su padre, tan solo para que rápidamente les azotara la enfermedad a la señora y alguna que otra de sus hermanas. Cuando su corazón comenzaba a anhelar el cariño que recibía, todo perecía. Era como si todo lo que la rodeara estuviese destinado a la perdición. Tan solo en sus sueños podía encontrar la calma, al ver la imagen de un hombre de alas oscuras y metálicas, observándola con ojos penetrantes. En esos sueños ella se sentía extraña, pero era algo inusualmente reconfortante. Como un vigilante que la cuidaba y le mostraba una oscuridad bella y serena. Mas cuando despertaba todo volvía a ser el cruel y frío mundo donde solo había sufrimiento. Sentada en una esquina permaneció al ver entrar a un hombre imponente que pretendía separarlas ya que su ”madre” estaba en las ultimas. Pero a pesar de estar muriendo tenia fuerzas para intentar impedirlo, sin embargo el individuo no era de carácter paciente y pronto la situación se tornó violenta. Los gritos inundaron la casa, la madera crujiendo, no pudo soportar quedarse apartada al presenciar como su fiereza mataba a su familia. Rápidamente corrió hacia el disturbio y tomó al hombre con fuerza por el brazo y el cuello, solo buscaba alejarlo, pero desconocía la fuerza descomunal que poseía y jamás había usado. En ese intento por proteger a lo que quedaba de su familia, mató al hombre, a su madre y a su hermana pequeña que se encontraba en medio de ambos. El dolor y el disfrute de esas muertes fue demasiado para su quebrada conciencia. Huyó, corrió hasta que no pudo dar otro paso y se desmoronó agobiada sumiéndose en la tormenta de sus pensamientos. El tiempo pasó, y tuvo que valerse de vivir entre las sombras, sobreviviendo como podía. En su pecho sintió el urge de volver a sentir esa justicia impartida a las personas crueles, matar a quienes lo merecían. Calmaba su angustia esperando que llegase el momento de descansar y poder sentir la calma del hombre en sus sueños. El rumor de su existencia y sus actos se hacían escuchar por los alrededores de los bosques donde se ocultaba. Pero no sabía el fatal error que iba a cometer. Una de sus victimas resultó ser alguien muy importante para la autoridad griega, y su muerte no sería tomada a la ligera, fue perseguida hasta ser hallada y aprisionada. Fue torturada, obligada a luchar, en cada aliento y gemido de dolor rogaba por que la muerte la abrazara con rapidez y pudiese dejar de sufrir. Pero un estruendo llamó su atención e hizo que se esforzara por fijar su nublada vista. Agonizante en un charco de su sangre y la de sus enemigos, observó con sus ojos abiertos como platos como aquel ser de sus sueños estaba frente a ella, mirándola con curiosidad. No hubo palabras, no hubo pensamientos. Simplemente sonrió y extendió su mano ante aquel ser que sería su salvador y su mas grande admiración. Aquel que le dio el regalo de la muerte, y la llevó al inframundo para convertirse en el espectro de Behemoth. Un nuevo mundo que pronto sabría era el lugar a donde pertenecía y donde estaba el secreto a su verdadera vida, quedando tan solo las cicatrices en su cuerpo para recordarle lo que había sido su vida humana.


Objetos

• Guanteletes de la destrucción: Forjadas en las profundidades del inframundo, estos guantes de metal, se acoplan a ambas de sus manos a la perfección. Sus manos tomaron desde entonces el nombre de la protección y la destrucción. Pues estaban ordenadas a estar siempre cubiertas por este metal tanto para contener su fuerza, como para potenciar su daño en los momentos de furia y batalla. Más allá de lo impresionante que es su fuerza, la capacidad que le brindan estas armas va mucho más allá de lo imaginable. Y las garras adheridas son capaces de partir hasta los metales mas fuertes y poderosos.
(Solo por portarla aumenta en +1 Ataque y +1 Defensa. Si se usa como objeto causa 300 de daño.)



• Lagrima de soledad: Al parecer el juez de Griffon pudo notar que la mirada de Sune siempre se clavaba en él, ya fuese por largos ratos, hasta que se veía obligada a voltear la vista porque él se volteaba a observarla. Fue entonces que un día sin previo aviso, el juez se acercó hasta ella y le entrego una gota de cristal. Sin decir nada, tomó la mano de la joven y colocó en ella el obsequio. Atónita pasó un día entero observando el translucido y pequeño cristal, intentando comprender que significaba. Al día siguiente, con aún la gota en su mano observó de lejos al hombre y guardó el objeto en un pequeño trozo de tela, oculto en su pecho bajo sus ropajes. No quería preguntar, pues prefería tenerlo como un eterno recuerdo de él, y de la admiración que ella tenía por él, oculta en lo más profundo de su interior.
(Aumenta en +4 el cosmos. Si se usa como objeto el cosmos aumenta en +6)


Tecnicas

• Defensa:
Tempestad: Afirmando sus pies al suelo, cruza los brazos en forma de cruz frente a su rostro, conteniendo el primer impacto de cualquier ataque. Con el contacto puede notarse que esta envuelta por una especie de cúpula de cosmoenergia que pasa de ser translucida a oscurecerse, el aire a su alrededor se enturbia alborotando sus cabellos, elevándolos al igual que fragmentos que se desprenden de la tierra. Como si dejase de haber gravedad. Baja rápidamente uno de sus brazos hasta quedar como manecillas opuestas de un reloj, crea una llamarada negra que termina haciendo explotar la protección que la rodeaba en una onda expansiva, sirviendo de contraataque al devolver la hostilidad que se le había intentado aplicar.
(En caso de usar un contraataque con esta defensa, se podrá agregar +10% del daño absorbido del ataque del oponente.)

Muestra visual

• Ataques Básicos:
Destrucción: Sune choca sus puños uniéndolos a la altura de su pecho, encendiéndolos en ese instante en una llama de cosmos oscuro en cada una de sus manos. Retrae su brazo hasta casi llegar al final de su espalda, inflando su pecho en una profunda inspiración. Llevando todo el impulso de su cuerpo, golpea con uno de sus puños la tierra, generando al instante un inmenso cráter a su alrededor, toda el suelo comienza a agrietarse, direccionando una fuerza descomunal hacia todos lados. Dependiendo al fuerza que le de al golpe será mayor el rango de las grietas por las cuales el aire se torna en una presión sofocante que de envolver a algún enemigo lo aplastaría, ahogándolo y quebrándole los huesos. Dándole tiempo a Behemoth para abalanzarse hacia su objetivo, retrayendo su otro puño para clavar un golpe devastador al sujeto aprisionado por la destructiva fuerza de su cosmos. Este golpe final carga con la mayor parte del cosmos acumulado, de forma que si es bien utilizado el cosmos y el golpe es bien acertado podría atravesar el cuerpo de un humano, y que las heridas vayan mas allá de graves, una letalidad lenta y dolorosa.
(Aquel que reciba este ataque, por las heridas deberá descontarse 100 de HP por turno. Si tu cosmos supera los 45, podrás aumentar el daño en +350.)

Sombra de desesperación: Sune se planta firmemente al suelo, sin que su oponente lo note una sombra comienza a extenderse a través de la tierra, creando un puente entre ambos, plasmando en el suelo el símbolo de Behemoth. Se mantiene a la espera de cualquier movimiento de su enemigo, para que este caiga en la cuenta de que no le es posible moverse, pues la sombra que lo ha atrapado no solo lo ancla al suelo sino que paraliza todo su ser, recién entonces ella sonríe macabramente. La negrura que se extiende por debajo de sus pies no es cualquier sombra, sino la esencia de miles de almas errantes de las prisiones e infiernos más horrendos del inframundo. Basta con que ella termine de llamarlos pronunciando una palabra, “Desespera”, con esto como si una orden fuese dada. Para su enemigo lo único que ocurrirá será que comenzará a sentir su cuerpo oprimido y podrá ver el daño generado en este y su armadura, sin poder hacer nada al respecto. Lo que tal vez muy pocos puedan percatarse es que se trata de espíritus putrefactos y horrorizados que surgen de la sombra aferrándose al cuerpo del objetivo, devorándolo y destrozándolo en su desesperación.
(Si esta técnica es efectiva con dado de cosmos 65+ los espíritus perforaran la carne de tu rival directamente, logrando así que la putrefacción de sus cuerpos penetre en la misma piel del rival, contaminándola a tal grado que esta empieza deteriorarse. Debido a esto, por turno el rival deberá descontarse 150- de Hp durante todo el combate.)

• Ataques Normales:
Ojos de la Muerte/Ojos de la Ruina: Esta técnica se trata mas bien de una habilidad única que poseía su mirada, que al perfeccionarla y controlarla con su manejo de cosmos se volvían un arma sorprendente y letal. Se podría decir que sus ojos siempre fueron un portal a su persona, aquellos que llegaban a ver su mirada fijamente decían que era algo cautivante, como si uno se hundiese en ellos hipnotizado. Pero para su forma tosca y tímida de ser, no es usual que mantenga un contacto visual prolongado. Pero con el tiempo logro encontrarle una ventaja. Este ataque posee dos nombres en uno, pues hay dos formas en la que Sune utiliza sus ojos, cerrándolos un instante se concentra. Cuando al abrirse sus ojos estos brillan en un amarillo intenso, su mirada al entrar en contacto con la de su oponente, hará que toda intención hostil se vuelva en su contra, dañándose a si mismo. Es decir si alguien quisiese atacarla ya sea con un arma o un ataque cósmico, su mirada en este caso llamada “ojos de la muerte” hará que el contrincante se vea forzado a automutilarse. Por otro lado si al abrir sus ojos estos brillan en un tono entre celeste y violáceo, la función en este caso de los “ojos de la ruina” será de anular por completo a su oponente, desvaneciendo su cosmos y apagando sus funciones vitales, su corazón no latirá y sus pulmones dejarán de aspirar aire y sus sentidos se apagarán hasta que se caiga en el adormecimiento total y no quede mas que un cadáver, es sin embargo mas benevolente que la mirada de la muerte pues se deja de sentir. La ventaja de poder controlar esta habilidad con su cosmos es que esta mirada penetra mas allá de los sentidos, es decir que incluso si su enemigo intentase evadir el contacto visual, una vez que los ojos de Sune se han concentrado en su objetivo no podrá detenerse su efecto, a menos que ella corte con el contacto visual o que su rival sea capaz de hacerla cortarlo.
(Onrol: Esta técnica traspasa la defensa de la armadura que posee el rival sin importar el rango y en caso de ser un guerrero su oponente, este tendrá que auto mutilarse una parte del cuerpo Onrol obligatoriamente si no se defiende efectivamente del "Ojo de la Muerte".
Pelea: Esta técnica se defiende con dado de defensa 12 y si es efectiva, el rival deberá descontarse 300 de Hp por turno durante 3 turnos debido a la detención temporal de sus funciones vitales debido al efecto del "Ojo de la Ruina".)