Richard Vs Shaka

la calida brisa del desierto se podia sentir por todo el lugar, la arena de tonalidad dorada se paseava en el viento en pequeños cumulos que amenazaban la vista de quienes transitaran por aquel lugar, sin embargo a pocos metros el nilo se encontraba, mis pasos se hiban borrando de la arena por aquel elemento intangible que rosaba mi piel sin cesar, me agache, incandome por completo introduje las manos en el agua y salpique un poco mi rostro, luego me sente a la orilla de aquel caudal, no llevava armadura solo unas vestiduras que cubran mi cuerpo lo suficiente, descubri mis pies y los introduje en la fria a gua, cerre los ojos y comenze a relajarme, mi cosmos se esparsia por todo mi cuerpo y un aura anaranjada me cubria, estaba en paz, tranquilidad y paz, sin embargo, no podia bajar la guardia en aquellos momentos, unan guerra estaba a punto de iniciar y no me podia dar el lujo de ser preza fazil, era uno con aquel paraje fertil y desierto a la vez, mil penzamientos transcurrian en mi mente entre ellos a la imagen de mi hermano danzaba, pasaron unos instantes y mi mente quedo en blanco, completamente en trance quedo mi mente y mi alma, sentia todo en mi alrededor sin siquiera estar tenso o mover un solo musculo.

Mientras me encontraba descansando en aquella orilla del rio, los peces nadaban tranquilamente por aquellas aguas y entre mis pies danzaban, el viento arido y calido rosaba mi tes y mis labios sentian el arido desierto, mis cabellos ondeaban con aquel intangible elemento, sin embargo en total tranquilidad me encontraba, de pronto, una presencia de gran poder se acerco hasta mi posicion, gire mi rostro y alli estaba, un joven con cabellos dorados y un aura simplemente pasifica pero imponenete, sus palabras no se hicieron esperar, al pareser buscaba un entrenamiento, era logico y normal, todos los guerreros querian estar a la altura de la epica batalla que se avecinaba y era hora que yo tambien entrenase un poco, me coloque de pie de inmediato y un comsos anaranjado me cubrio por completo, la armadura de aphopis frente a mi aparesio para luego desprenderse y adherirse a miser, mi armadura estaba lista y mi cosmos tambien asi que solo hable, un poco.

Santo de Athena, tu cosmos delata tu proseder, acepto tu reto con mucho gusto, sin embargo incist o en que antes tomes un poco de agua el viaje tan largo que has hecho se nota en tu aspecto, hidraatre y comenzemos a entrenar, que sea el mejor guerrero quien gane, dichas aquellas palabras solo calle, a la espera de una respuesta.

Mi cosmos se alzaba con gran impetu y fiuerza, las arenas del desierto se ajitaban y las aguas del rio nilo se movian con gran ferocidad, el guerrero atheniense acepto mi invitacion a refrescarse y luego insito a que atacase o primero, acenti solamente con la cabeza y mi cosmos se alzo aun mas, una gran aura anaranjada se podia divisar envolviendo cada centmetro de mi ser, una onda expansiva sali od mi cuerpo y los vientos se tornaron uracanados, una gran tormenta de arena se formaba por mi poder, mis pasos eran seberos y solo di unos cuantos para estar un poco mas cerca de mi rival, o mas bien mi compañero de batalla, no debia tener piedad, aquel combate debia ser honorable, sin trucos ni jugarretas y mas importante aun con todo el esfuerzo por parte de ambos bandos.

Creo que comenzaremos esto con algo ams fisico, con mi mano derecha tome mi espada y la desembaine, aquella espada poseia gran fuerza y mi cosmos la cubria tambien, estire mi brazo y con aquella arma empuñada de inmediato me diriji hacia mi oponente con el fin de atacarlo rapidamente, no perderia ni un instante mas, y las cortesias ya se habian acabado.

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HP: 4500

Daño total: 300

objeto:

Mi ataque parecia haber sido efectivo, sin embargo habia fallado, cualquier guerrero a servicio de un dios o porlomenos que contrlolase el cosmos se podia darcuenta, sonrei y gire mi rostro hacia donde ya se encontraba aquel santo de Athena, lo mire fijamente, y escuche sus palabras, enbaine mi espada y hable, veo que eres fuerte, aun con un acto tan sencillo como esquivar mi ataque con la velocidad de la luz me puedo dar cuenta de ello, pues es un honor entrenar con una persona como tu te dare mi nombre, Richard, ese es el nombre que se me a otrogado desde mi nacimiento y soy el Guardian celestial de Apophis, luego de mis palabras el cosmos de aquel sujeto comenzo a incrementarse de una manera mui imprecionante su cosmos estaba siendo materializado y en su pecho un gran resplandor aparecia, depronto un gran poder salio hacia mi ser con gran velocidad, me pose fiememente y mi cosmos me rodeo con gran fuerza y rapidez, los suelos se estremecieron y bañados en mi cosmos ya se encontraban cuando tres luces salieron y crearon una piramide de cosmos solido que repelio por completo aquel ataque, luego aquellas paredes se desvanecieron y aquellas energias se elevaron con el viento hacia los sielos, ahora es tiempo de que veas mi poder joven guerrero, y tambien me gustaria conoser tu nombre, luego de aquellas palabras los cielos se nublaron y estruendos sacudieron todo el lugar y al señalar con mi mano derecha a aquel guerrero de Athena rayos comenzaron a caer, dirigiendoce a gran velocidad hacia mi adversario, ante mi espectante atencion.