Esperando al patriarca

Llegue a mi casa eh inmediatamente escondi los 105 frutos que tenia en el lugar mas seguro que conocia por lo que estaba supremamente convencido de que nadie los encontraria.
Descansando en mi casa despues de una mision tan larga pude pensar mas claramente en lo que habia pasado pero aunque ya veia la victoria de Onoki mucho mas sencilla no pude dejar de preocuparme por el, pero no era tiempo para eso tenia que descansar porque sabia que si me necesitaban tenia que estar al maximo de mis capacidades y nunca se sabia cuando atacarian los titanes o hades o hasta poseidon cuyo cosmos provoco un temblor por toda la tierra.

-Patriarca shion espero fervientemente tu llegada.

Dije esto mientras en mi posicion de buda me deje llevar por mi meditacion.

Ya habia descansado mas sin embargo no abandonaba mi meditacion ya que tenia que volverme mas fuerte para ayudar de verdad en las guerras que amenazaban al santuario.
Derrepente senti el cosmos de la armadura de sagitario entrar a la velocidad de la luz en la casa de Onoki, esto era todo, no lo podia creer me quede pasmado en mi meditacion mientras me lamentaba y sentia que la culpa carcomia mi ser por haber abandonado a Onoki en una situacion asi.
Era el final, el caballero mas poderoso de todo el santuario habia sido abatido en una mision en la cual se le ordeno acompañarme, mision que inicio por peticion mia hacia athena. Esto que habia ocurrido era algo imperdonable.

-Onoki me has fallado, jamas pense que tu moririas en esta mision. Le has fallado a athena y lo peor es que has demostrado que yo mismo me eh fallado por dejarte a tu suerte y por no ser lo suficientemente fuerte para detener tu tecnica, y quedarme a acompañarte.

Pense mientras me sentia peor que un traidor. Pero ya que no habia mas que hacer decidi quedarme en mi casa meditando bajo el juramento de que algun dia iba a vengar su muerte acabando con esos dos jueces y mas que nada con el espectro que habia dañado mis planes y que habia tirado 3 de los frutos del mokurenji al rio aqueronte.

No lo podia creer Onoki en persona llegaba a mi casa a pedirme permiso para atravezarla, pero no, no podia ser Onoki.
Aun consternado por lo que mis ojos veian articule unas palabras y pretendi que no sabia nada de nada asi que calmadamente sin abrir mis ojos le dije:

-Gran portador de la armadura de sagitario que te trae a mi casa? cual es el motivo de que estuvieras fuera de tu casa mientras que la guerra contra los titanes se avecina?

Dije esto como prueba para pasar por la casa de virgo ya que la situacion era muy sospechosa Onoki estaba luchando y ahora llega ante mi sin ninguna raspadura ni siquiera la que le habia hecho el juez de garuda con sus garras y ademas de todo se presentaba sin su aramadura.
Ya que en estos momentos yo era el guardian de la primera casa custodiada de las 12 no podia permitir bajar mi guardia y causar mas problemas.

Era mas que obvio que el caballero frente a mi no era onoki y mucho mas obvio cuando vi que se quito una mascara blanca de su rostro y me
mostro que era uno de los generales marinos de poseidon, pero me
sorprendio mucho mas cuando dijo sus palabras de que tenia un plan en
contra de athena. me concentre mientras el marino se iba para buscar el
cosmos de athena pero parece que algo lo opacaba y no lograba llegar a
su mente para darle mi mensaje por lo tanto lo unico que pude hacer fue
buscar a el gran patriarca.

Me sorprendio la noticia del patriarca ya que era obvio que el cosmos de athena habia desaparecido hacia un tiempo y pense que el patriarca estaria pendiente de ella desde el momento en que le di mi mensaje aunque yo creo que el patriarca tiene todo bajo control despues de todo es el patriarca.
Pero despues de el mensaje de preocupacion por la desaparicion de athena el mismisimo patriarca me habia mandado a llamar por lo que tenia que responder a su llamado de inmediato.

-Cual sera el motivo de la mision que me encomendara el patriarca?.

Pense mientras me levantaba para acudir al llamado del gran patriarca asi que sali de la casa de virgo a la velocidad de la luz para llegar lo mas rapido posible ante el.